Las Consecuencias de Reprimir tus Emociones

Alguna vez te han dicho o tú mismo has repetido la frase “no llores, eso es malo”. Es una respuesta automática que generalmente se dice cuando ves a alguien llorar, pero nunca te has preguntado, ¿Por qué llorar es malo?. La respuesta es simple. ES MENTIRA. No existe libro alguno en el que se exprese que llorar sea algo negativo (a menos que sea de forma consecuente y duradera). Cuando decimos estas palabras estamos bloqueando al individuo, haciendo que contenga sus emociones, lo cual puede traer grandes consecuencias a largo plazo. ¿No nos crees? Bueno coloquemos un ejemplo, los castores construyen represas para evitar el paso del agua en ciertos lugares, cada pedazo de madera funciona como un sello, el cual va cubriendo y cubriendo hasta que logra detener el flujo de la corriente. Es una buena solución temporal, pero ¿qué sucede cuando ocurre una tormenta muy fuerte? La represa cae, dejando toda el agua pasar de nuevo llevándose con ella toda la madera recolectada. Este es un claro ejemplo de lo que continuamente hacemos con nuestras emociones, si nos sentimos deprimidos generalmente nos decimos “no llores, se te pasará” colocamos un tronco en nuestro dique, y así vamos recolectando muchos más, pero lo que no sabemos es que un buen día puede presentarse una situación tan fuerte y devastadora que será capaz de arrasar con todos los parches que habíamos construido, derrumbándonos de mil formas emocionalmente.

Esta es una de las principales consecuencias de bloquear nuestros sentimientos; pero ¿Por qué nos hacemos ese daño constantemente? Existen muchas explicaciones para ello, la principal son nuestros mecanismos de defensas, seamos sinceros, nadie quiere que lo vean en su punto más vulnerable, muchas veces puede llegar a ser vergonzoso que nos vean como personas débiles, y por sobre todas las cosas tememos a que saquen provecho de nosotros. Así que nos escudamos escondiendo todo y reprimiendo las ganas de llorar o de gritar. Muchas veces esta reacción, se produce debido a la forma en la que nos educan en la infancia, algo establecido por la sociedad en la que predominan frases como “un hombre no debe llorar” o “tristeza es señal de debilidad”, las cuales son inculcadas desde que somos pequeños y se vuelven recurrentes de generación en generación, gracias a nosotros mismos. Otras veces, pensamos que a nadie le importa lo que podamos estar sintiendo, es mejor dejar esas cosas a un lado y enfocarnos en lo que es “realmente importante”. Asimismo, están las personas que son tan altruistas que se preocupan por los sentimientos y emociones de los demás, pero nunca por los de sí mismo. Esta situación puede ser una de las más dañinas, ya que no sólo tienes que lidiar con el enredo de situaciones que se amontonan en tu inconsciente, sino también con los problemas de las personas que quieres.

Pero, ¿qué es lo realmente importante en este tipo de situaciones?, pues lo esencial es QUERERTE, puede sonar muy egoísta pero primero estas TÚ, y siendo esto posible debes conocerte y enfrentar lo que estas sintiendo. ¿Cuántas veces has llorado escondido, o simplemente dices que estás bien para no tener que hablar de ello? Esto sucede, por miedo, miedo a conocernos mejor, miedo a aceptar que no somos de hierro, miedo a admitir que necesitamos ayuda, y especialmente miedo a sentirnos inútiles, por no saber cómo afrontar dichas situaciones. No es justo que seamos tan superficiales con nuestra salud mental, y la sociedad juega un papel fundamental en ello: si estamos felices podemos gritarlo, podemos reír a carcajadas y anunciarlo hasta en las redes sociales, pero en el minuto en el que te sientes triste no debes hablarlo, las personas pueden alejarse de ti por demostrarlo o simplemente calmarte con un “no llores, eso es malo” o “cálmate, trata de no pensar en ello”, ayudando a construir más y más represas emocionales.

¿Cuáles son las consecuencias de estas represas emocionales?

Para empezar, el contener tanta emociones puede llegar a ser una bomba de tiempo, en cuanto llegue una situación que realmente toque hasta el último nervio de ti sentirás que explotarás, y esto puede suceder de diferentes maneras de acuerdo a tu personalidad; existen personas que actúan de forma agresiva llegando a decir cosas muy dolorosas y luego todo se transforma en algo mucho peor, pues hieres a diferentes personas con tus palabras durante el proceso, e incluso pueden llegar a lastimar físicamente también. Otras son lo opuesto, se cierran en sí mismos de tal forma que pueden llegar sufrir de una grave depresión, debido a que ya no encuentran más defensas con las cuales protegerse y sienten que no hay solución para tantas situaciones, sus emociones lo superan al borde de la desesperación. Por otra parte, en ciertas ocasiones se puede presentar la somatización, descrita por Porras (2008), como el proceso por el cual se transforman o convierten problemas emotivos en síntomas somáticos. Un ejemplo de ello, es cuando tienes algo que decir pero no lo haces y empiezas a sentir como un nudo en la garganta que se transforma en dolor, o cuando sientes que estas lleno de problemas y te dan constantes dolores de cabeza o de espalda, eso es tu cuerpo hablando, ya que cuando reprimes tantas emociones de forma inconsciente tu organismo dice lo que tú no te atreves a expresar.

¿Qué podemos hacer ante esta situación?

Si alguna vez te has sentido de esta forma, o conoces a alguien que está pasando por una situación similar, es importante que conozcas lo que es un mecanismo de defensa y como puedes trabajar para mejorar este aspecto de tu vida.

Según Porras (2008) “un mecanismo de defensa es un proceso psicológico automático que protege al individuo de la ansiedad y de la conciencia de amenazas o peligros externos e internos. Los mecanismos de defensa mediatizan la reacción del individuo ante los conflictos emocionales y ante las amenazas externas”.

Entonces, estos mecanismos son responsables por las actitudes que tomamos en nuestra vida cotidiana ante diversos conflictos, y a pesar de que trabajan de forma inconsciente podemos aprender a manejar las situaciones de una manera más adecuada. Aquí te mostramos algunas recomendación para ello:

-No tengas miedo a sentir. Es tu derecho como ser humano y nadie puede hacerte sentir culpable o mal por llorar o simplemente no estar de humor, la clave es saber manejar dichas situaciones. Si te sientes incomodo expresándolas a alguien, hazlo contigo mismo, cuando estés solo toma un tiempo para pensar en ti, en las cosas que te abruman, desahógate ya sea llorando o escribiendo en un papel todas esas cosas que te perturban, luego analízalas e interpreta si la actitud que estas tomando es la más adecuada para solucionarlas.

-Existen muchas técnicas que puedes utilizar para sentirte mejor contigo mismo, tan sencillas como realizar actividades que te permitan drenar lo que estas sintiendo, muchas personas escogen hobbies como la pintura, el yoga, natación, futbol, trotar o caminar, a veces la actividad física logra ser un excelente distractor y un buen sistema de drenaje de emociones negativas.

-Libera esa baja tolerancia a la frustración. Gran parte de las emociones negativas que llegan a nuestra mente, ocurren debido a  la molestia que sentimos cuando no logramos algo como lo teníamos planeado, y eso nos frustra de tal manera que nos autocriticamos y llenamos de insultos a nuestro inconsciente, lo cual provoca a largo plazo sentimientos de culpabilidad y depresión.

-La emociones son realmente contagiosas. El modo en que comiences tu día puede determinar como sera el resto de éste y la forma en la que los demás te tratarán. Así que realiza un poco de introspección. Cuando sientas que las cosas en tu vida estan tomando un giro negativo, piensa en las cosas positivas que ocurren en esta. En vez de enfrascarte en lo que no tienes, enfócate en lo que si posees. Aqui te dejamos un vídeo que te podrá servir de ejemplo ante esta recomendación:

-Busca ayuda psicológica. Si estas técnicas fallan no dudes en ir a un psicólogo (y no lo decimos por hacernos publicidad), un especialista en salud mental te podrá ayudar mediante diferentes estrategias terapéuticas que te permitirán adquirir una óptima inteligencia emocional, al mismo tiempo que aprenderás a manejar la resolución de conflictos

Finalmente, queremos invitarte conectarte con tus emociones, recuerda que tu salud mental es igual de importante que tu bienestar físico. Intenta en lo posible no crear represas en tu inconsciente, y sobre todas las cosas trabaja en tu relación contigo mismo, porque como ser humano mereces ser libre de llorar, reír, gritar, emocionarte sin temor a lo que piensen los demás. No olvides que muchas veces las emociones que mostramos están disfrazadas, un ejemplo de ello son las situaciones en las que expresamos altos niveles de ira, cuando en realidad lo que estamos sintiendo en angustia y frustración. Si no nos crees, el siguiente vídeo te ayudará a comprender esto de una forma mas creativa y metafórica.

Para finalizar queremos invitarte a que dejes ir el miedo, grita, canta, llora, ríe; ¡en fin! Atrévete a sentir, porque a final de cuentas es tu vida y nadie puede disfrutarla mejor que tú. Siempre recuerda: 

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Autoras:

Lcda. Ana Vasconcelos

Lcda. Andrea Guerrero

¿Cómo nos Comunicamos?

Para comenzar debemos resaltar la importancia de la comunicación para el ser humano, ya que a través del tiempo ha sido el pilar más importante en el desarrollo del mismo y de la sociedad, desde su forma más rudimentaria como los jeroglíficos hasta la forma más sofisticada por medio de los avances tecnológicos, las personas siempre buscamos expresarnos y relacionarnos con nuestro entorno. De modo que contamos  con la capacidad y razonamiento necesario para expresarnos de diversas maneras conscientes e inconscientes, ya sea de modo escrito, verbal o corporal.

Teniendo la comunicación un papel tan importante en nuestras vidas, ya que nos permite estar conectados con lo que sucede a nuestro alrededor, al igual que posee la capacidad de expandir nuestros horizontes o limitarlos, debemos otorgarle la relevancia que tiene, y es que muy pocas veces somos conscientes de cómo nos comunicamos, es por ello que el artículo de hoy se encuentra dirigido a explicar los principales estilos de comunicación, de modo que te invitamos a que inicies una lectura reflexiva para que descubras  cuál es tu estilo de comunicación  y cómo te comunicas.

 Estilo de comunicación Pasivo: 

Este estilo se evidencia en las personas con poca seguridad para hablar y expresar sus ideas, se asocia con conductas pasivas, donde parten de la premisa que son más importantes los derechos de los demás que los suyos. Generalmente se produce en individuos con una deficiencia en las tres “A”, Autoestima, Autoconcepto y Autoimagen.

A continuación te mostraremos algunas situaciones donde se ejemplifica este estilo:

  • En una reunión con su equipo de trabajo para la discusión de un nuevo proyecto, la persona pasiva tiende a guardar silencio y en algunos casos a pesar que posee una gran idea que podría potencializar dicho proyecto, generalmente la guarda para sí mismo y prefiere apoyar la de los demás.
  • Con frecuencia pide disculpas, hasta en situaciones en las que no estuvo implicado, lo que generalmente produce no ser solicitada su opinión a la hora de tomar decisiones por las personas que lo rodean.
  • Siempre y en todos los escenarios de su vida piensa en los demás antes que en sí mismo, no importa cuál sea la situación o si están violentando sus derechos, para él lo importante son los demás, es por ello que posee una gran dificultad en decir “NO” ante las peticiones que le realizan.
  • Tienden a despersonalizar su forma de hablar, es decir hablan en tercera persona, ejemplo: “Nosotros Pensamos”, en lugar de “Yo Pienso”.

En líneas generales observamos a personas inseguras, ensimismadas, frustradas y en la mayoría de los casos con un gran potencial, el cual no dejan salir por su misma pasividad y por miedo al rechazo o fracaso.

Ahora en el polo opuesto tenemos el estilo de comunicación Agresivo:

Se manifiesta en las personas que siempre dicen tener la razón, buscando imponer sus condiciones, para estos los únicos derechos que importan son los suyos, todo gira alrededor de ellos. No necesariamente manifiestan su agresividad usando un tono de voz elevado, también emplean descalificativos, sarcasmo, intolerancia y desvalorización de los demás.

Algunas situaciones donde se evidencia este estilo son:

  • En una discusión grupal cuando alguien argumenta un punto de vista distinto al suyo, tiende a ofuscarse e inmediatamente responde queriendo quitarle todo el valor al argumento dado.
  • Tiende a minimizar o criticar, cualquier opinión, pensamiento o conducta que contradiga sus ideologías o creencias, las únicas aceptables son las suyas.
  • Generalmente son personas rencorosas, a las que cuesta satisfacer y buscan que los demás actúen bajo sus condiciones.
  • Dicen lo que quieren, cuando quieren y como quieren, sin importarles en lo más mínimo a quienes hieran en el camino.

De manera global se puede decir que, el estilo de comunicación agresivo se da principalmente en personas dominantes, controladoras y muy conscientes de sí mismas, las cuales poseen una gran capacidad para manifestar sus criticas destructivas y buscan constantemente hacer valer sus propósitos.

Del mismo modo es importante señalar que en el medio de los estilos señalados con anterioridad se encuentra el Asertivo.

La principal característica del estilo Asertivo es la siguiente “Yo respeto los derechos de los demás, pero al mismo tiempo hago respetar los míos”. Son personas que se conocen a sí mismo, saben cuáles son sus límites y se lo evidencian a los demás, poseen fortaleza en las tres “A”. Saben que son seres humanos, por ello no están exentos de cometer errores pero esto nos los frena en la persecución de sus metas.

Algunas situaciones donde se puede evidenciar una actitud Asertiva son:

  • En una discusión grupal, exponen su punto de vista, al mismo tiempo que respetan el de sus compañeros, pudiendo manifestar su desacuerdo en algunas situaciones de una manera ecuánime y sin necesidad de criticar o desvalorizar a los demás.
  • En todas las áreas de su vida tiene la capacidad de reconocer y manifestar sus sentimientos, tomando en consideración a los otros, pero sin traicionar sus creencias.
  • Puede establecer su posición y decir “NO”, cuando lo cree conveniente, sin necesidad de ser déspota, critico, sarcástico o pedir una infinidad de disculpas.

¿Aún te quedan dudas acerca de cómo destacan estos estilos de comunicación? Un ejemplo muy claro de ellos se puede evidenciar en el siguiente vídeo:

Una persona Asertiva, cuenta con la madurez necesaria para reconocer sus defectos y virtudes, establecer límites y concesiones, posee inteligencia emocional, independencia, tiene valores a los cuales defiende cuando siente que son ultrajados. Ahora bien según lo que leíste con anterioridad, ¿cuál de los tres estilos consideras que posees o cuál de los tres estilos observas más en las personas que te rodean?, si quieres llegar a ser más asertivo aquí te dejamos algunos tips.

Claves para una conducta Asertiva:

  1. Aprende a conocerte a ti mismo, esto es lo principal, cuando hablamos de asertividad, es fundamental que conozcas tus fortalezas y debilidades, cuáles son tus sentimientos y que los están originando. Te vamos a dejar una tarea que parece sencilla, pero que a muchos se le dificulta hacer cuando se la pedimos, busca una hoja y un la lápiz, divídela en dos y en un lado colocaras cinco virtudes y en otro cinco defectos, luego analiza cuanto te costó realizarla. Eso te podrá dar una idea de cuánto te conoces.
  2. De la mano de conocerte, está el quererte y aceptarte, la asertividad no es sinónimo de perfección por el contrario, el ser asertivo nos permite darnos cuenta de nuestro errores y aceptarlos, por eso el amor propio es fundamental en todos los aspectos de nuestra vida, aquí podría entrar la siguiente frase: “si tú no te quieres y te respetas, ¿crees que lo harán los demás?”.
  3. Trabaja en tu independencia y anímate a expandir tus horizontes, salir de tu zona de confort y reírte de ti mismo, es una muy buena manera de empezar a perder el temor a proponer tus ideas y que están sean rechazadas, recuerda que nadie es perfecto.

¿Quieres un ejemplo de como llevar a cabo estos tips? Es muy fácil, revisa el siguiente video en el que se muestran 5 sencillos pasos para lograr ser asertivo 😉

Esperamos que el artículo de hoy sea el indicio para que empieces a ser más asertivo, finalizamos con este pensamiento:

«Recuerda que, por siempre tratar de quedar bien con los demás con frecuencia te irrespetas, o por el contrario por tratar de desvalorizar lo que hacen los demás agredes y maltratas, irrespetando al otro. Intenta ser más asertivo, podrías lograr hacer respetar tus derechos en armonía con el respeto por el derecho ajeno.»

Autoras:

Lcda Andrea Guerrero

Lcda Ana Vasconcelos

MI HIJO NUNCA ME OBEDECE, ¡YA NO SÉ QUÉ HACER!

Hemos perdido la cuenta de cuantas veces se escucha esta frase en consulta. Padres preocupados, o realmente desesperados llevan a sus hijos para que tratemos de comprender que está mal con ellos, porque en la escuela la profesora les dijo que era “hiperactivo” o leyeron en una revista que puede tener “el trastorno de déficit de atención e hiperactividad” mejor conocido como TDAH en términos psicológico, o peor aún puede ser “negativista desafiante”. Entre otras cosas, muchos representantes nos cuentan como su hijo suele hacer lo que quiere, nunca escucha, no le obedece “por más que lo amenace o le regañe”.

Como psicólogos nuestro deber es oír a los padres y luego ver la perspectiva del niño, evaluarlo e integrarlo a la terapia, recordemos que un niño o niña jamás verá las cosas o las entenderá al igual que un adulto. Pero al realizar este trabajo aplicando todas las pruebas necesarias para descartar problemas de personalidad, inteligencia o conducta,  para nuestra sorpresa nos damos cuenta de que no hay ningún problema de este tipo en el paciente. Suele ser un niño/a con una inteligencia acorde a su edad, sin problemas de hiperactividad, ni de conducta, sin ningún tipo de trastorno y generalmente con una creatividad enorme, rasgo sumamente normal y apreciado en los infantes.

ENTONCES, SI EL NIÑO NO TIENE NINGÚN ASPECTO COGNITIVO O CONDUCTUAL COMPROMETIDO, ¿QUE ES LO QUE ESTA PASANDO?

Bien, cuando hablamos de esos aspectos más científicos y médicos el niño está en condiciones óptimas. Pero, sucede algo muy peculiar cuando realizamos el test de la familia o de figura humana, acompañado de conversaciones con el paciente. Entonces allí descubrimos que si existe un inconveniente y es en el ÁREA EMOCIONAL.

El área emocional comprende todas esas emociones o sentimientos que presentamos en nuestra vida diaria (rabia, tristeza, alegría).  Es un aspecto muy importante que interviene de mil maneras en nuestro convivir, y puede afectarnos de mil otras si algún evento hace que estas emociones se presenten de forma inadecuada.

Es así como de acuerdo a cada caso que hemos visto,  estos problemas emocionales se presentan debido a diversas circunstancias, entre las cuales podemos destacar:

-Desorganización en el sistema de disciplina: Esto sucede cuando no existe coherencia entre lo que dice mamá y lo que dice papá, o lo que dice mamá y lo que dice la abuela. Por ejemplo, mamá establece que si al llegar a casa Pedrito no ha hecho las tareas, no habrá video juegos ni tv por el resto del día, pero cuando papá llega casa, ve a Pedrito triste por el castigo y le dice que no le haga caso a su mamá y que puede ver tv. ¿Qué ocurre allí? Ambas figuras de disciplina se contradicen, dándole al niño el poder de hacer lo que quiera, y saber que a pesar de que le impongan castigos, estos serán removidos al minuto que llegue papá.

-Forma agresiva de impartir disciplina: Son muchas las veces en las que vemos a un niño llorando en un lugar público y escuchamos a alguien decir “si fuese mi hijo, le diera unas cuantas nalgadas para que aprenda”. O simplemente vemos como la madre le grita y lo hala del brazo de forma agresiva acompañado de un “cállate” o “quédate quieto”. Ahora reflexionando en este tema: si a ti alguien te grita, y te maltrata, ¿te quedarías quieto?. ¿Cómo le puedes pedir a alguien que deje de gritar, cuando tú le estas gritando?. Los niños a pesar de ser pequeños entienden perfectamente lo que es el maltrato, y no lo decimos conceptualmente sino mediante hechos y la expresión de emociones. Por ello, si tu hijo observa que cuando tu estas molesta le gritas, su reacción al enfadarse podrá ser la misma, porque es lo que ha aprendido desde el hogar. Disciplinar de esta forma puede traer dos tipos de consecuencias:

  1. El niño crece con una personalidad agresiva, expresando sentimientos reprimidos y reflejando lo vivido dentro del hogar mediante diferentes acciones inadecuadas, tanto en la escuela como en sus otros entornos.
  2. El niño crece con una personalidad introvertida, nervioso, con grandes problemas para expresar sentimientos, y con gran necesidad de aprobación por parte de los demás.

-Recompensas excesivas: Para comprender mejor este aspecto, te colocamos un ejemplo clásico:

“mamá quiero un helado”

-No María, ya dentro de poquito vamos a almorzar

-¡Pero quiero el helado! (llora y patalea)

-te dije que no María

-¡pero lo quieroooo! (llora y grita)

-¡ay ya! ¡toma el helado pero deja de gritar!

¿Que fue inadecuado en esta situación?. Como pueden observar la madre cedió su autoridad, porque la niña simplemente comenzó a llorar. Muchas veces aunque no lo crean nosotros mismos condicionamos a nuestros hijos, al ceder ante sus llantos. Les estamos enseñando que al llorar obtendrán lo que quieran a pesar de que le fue negado una vez. Lo malo de esta situación es que no sólo suele suceder con un dulce, sucede con sus responsabilidades como guardar los juguetes, tomarse un baño, ir a dormir temprano, entre otros. También existen padres que son realmente complacientes y les dan miles de recompensas a sus hijos (dulces, juguetes, refrescos, entre otros) sin darles a entender que también ellos deben ganárselas y con esto no nos referimos a que deben trabajar o algo así, sino mediante el cumplimiento de sus deberes tanto en la escuela como en el hogar. Este escenario también suele ser muy frecuente en niños de padres divorciados, los padres pueden excusarse diciendo “es que el divorcio ha sido muy fuerte para él y por eso no le negamos nada de lo que quiere”; ante situaciones como esta lo recomendable es menos obsequios materiales y más entendimiento, atención, cuidado y amor, siempre teniendo en cuenta que si el niño tuvo una conducta inadecuada debe ser reprendido de manera adecuada (sin gritos, ni maltratos)

De lo contrario cuando esto sucede estamos criando a niños que al crecer tendrán graves problemas de tolerancia a la frustración, debido a que han sido educados con la creencia de que todo lo tendrán si tan sólo lo quieren o lo piden, no tienen límites, ni castigos adecuados, por lo cual al presentarse un problema que esté fuera de su alcance de resolución o simplemente que no logren alcanzar algún plan trazado, la frustración será tanta que podrá conllevar conflictos emocionales graves, incluyendo la depresión.

RECOMENDACIONES

Si sientes que encajas entre estos casos o que igual necesitas ayuda en estos aspectos, no te preocupes, existen muchas formas de manejar estas situaciones, y nosotras nos comprometemos a ayudarte mediante los siguientes tips:

-Cuando hables con tu hijo trata siempre de estar a su altura, sin gritarle sino por el contrario hablar de una forma pausada, de esta manera el podrá sentir más confianza y no te verá como alguien muy superior a él.

-Jamás utilices el maltrato físico como modo de castigo, ni siquiera como amenaza, lo único que lograrás con ello son moretones en el cuerpo del niño y que él no te respete, sino que te tenga miedo.

-Establece normas dentro del hogar, horas para ver tv, hacer la tarea, dormir, entre otros. Es importante que tu hijo crezca con cierta organización para este tipo de cosas, recuerda que todo en exceso es dañino así que asigna horarios apropiados para las actividades que realiza en casa. Si tienes dudas de como impartir este tipo de elementos en casa, revisa el siguiente video, en el que te explican diversas opciones:

-Aclara que así como los niños tienen derechos, también poseen deberes los cuales pueden asumir consecutivamente. ¿Cuáles deberes puede cumplir en el hogar?, cosas sencillas como tender su cama, guardar sus juguetes, hacer sus tareas, lavar el plato en donde comió, entre otros. Estos dependerán de la edad del niño y su desempeño. Dichos deberes son de suma importante porque enseñan al niño a asumir responsabilidades y a ser cada vez más independiente.

-Disciplina mediante castigos y recompensas, y con esto no nos referimos a nalgadas y a regalos. Estos pueden ser aplicados en cosas muy simples. Por ejemplo: Un castigo apropiado seria no ver tv por el resto del día, o no jugar en la computadora por 2 días (la duración del castigo la puedes establecer de acuerdo a la gravedad de la conducta inadecuada que demostró). Por otro lado, una recompensa podría ser salir un día a pasear al parque, o quitarle un deber que no le gusta por unos cuantos días (ej: tender la cama). Estos elementos serán establecidos de acuerdo a su comportamiento, es importante que no sobrecargues al niño con ellos, pues no comprenderá porque se ha merecido un castigo o una recompensa. Cabe destacar que, de la misma forma se puede actuar durante los episodios de rabietas, los cuales pueden darse de forma seguida en los niños con altos niveles de agresividad o frustración; es por ello que en el siguiente video se dan tips para lidiar con éstas:

-Felicítalo, dale ánimos, y sobre todo expresa mucho amor, si tu hijo saca buenas calificaciones dile cuan orgullosa estas, y si no lo hizo, igual motívalo dile que aunque no logro un “A”, es inteligente, creativo y podrá alcanzar muchos logros para la próxima vez. Trata de ser ese entrenador que motiva a los jugadores de su equipo, sin reproches ni comparaciones. Cada niño es único y aunque otros se destaquen más en lo académico, puede que otros sean mejores en los deportes, en el arte o muchas otras áreas importantes.

-Si tu hijo tiene mucha energía no significa que sea hiperactivo. Procura evitar etiquetarlo de esta forma. Generalmente, cuando los niños son algo inquietos la mejor solución es integrarlos a actividades positivas que exploten su potencial, ya sea algún deporte, danzas, o incluso incentivar la lectura.

-Evita el uso excesivo de la palabra “NO”. Es una expresión que limita con constancia a los niños. Por ejemplo: en vez de decir “Paola, no corras” puedes decir “Paola, es mejor que vayas despacio, si corres podrías caerte y lastimarte”. Así no sonará como una orden, sino como un consejo.

-Es fundamental ser coherente, especialmente a la hora de asignar normas, para ello es necesario que las personas que conviven con el niño respeten la autoridad de ambos, sin revocar castigos ni quitar recompensas. Asimismo la coherencia es vital en tus actos, no puedes pedirle a tu hijo que no tire basura en la calle cuando tú lo haces, o que no diga malas palabras cuando tú las dices constantemente delante de éste. Aquí te dejamos un ejemplo de ello a través de un corto video.

Por último pero no menos importante, bríndale mucho amor y paciencia. Recuerda que es un niño, no un robot. Y como tú lo hiciste una vez él hará travesuras, llorará, se caerá al correr, no sacará siempre “A” en la escuela, y gritará. Pero lo importante de esto, es que te tendrá a ti para superar estas situaciones y hacerle sentir que a pesar de todas esas circunstancias, él es único y que tú siempre estarás a su lado para ayudarlo, apoyándolo en cada momento.

Recuerda que ser padre no es una tarea sencilla pero si una de las más satisfactorias, cuando lo eres descubres lo que en verdad significa el amor incondicional, el compromiso, el sacrificio, las noches de insomnio, tardes de alegría, risas, sonrisas, explorarás todos los roles que puedes llegar a hacer en tu vida como de maestra (o) enseñando y ayudando con su tarea, doctor cuando se enferma, jugador y árbitro de futbol, chefs, costurera, diseñadora, entre otros, cabe destacar que no existe el manual perfecto que te enseñe a ser un buen padre, cada familia es única y tiene sus propias características, pero a veces es realmente fructífero realizar esta pregunta ¿soy  y actúo como el padre que me hubiese gustado tener cuando niño?.

Autoras:

Lcda. Ana Vasconcelos

Lcda. Andrea Guerreo

PSICÓLOGOS: lo que realmente somos

Para entender que es un psicólogo y cuáles son sus principales funciones, es necesario iniciar explicando lo que no somos:

  • No somos videntes ni magos, no podemos descifrar y analizar tu personalidad con solo verte y escucharte unos segundos, por ende no es necesario que guardes silencio cada vez que te consigues a uno en algún lugar.
  • No tenemos una bola de cristal para predecir tu futuro, cada quien es responsable de la construcción del mismo.
  • No somos consejeros ni guías espirituales y mucho menos pretendemos decirte que hacer con tu vida, te psicoeducamos y te damos las herramientas necesarias para que tú la afrontes y te desenvuelvas en la misma.
  • No queremos convencerte de que asistas al psicólogo con el propósito de darle publicidad a nuestra profesión, ya que así como de vez en mes te puede dar un virus o una infección estomacal y acudes al médico, de vez en mes tu mente también puede necesitar atención y cuidado.
  • No somos loqueros y porque recibas atención psicológica no significa que estás loco, en realidad somos profesionales de la salud que nos enfocamos en brindar las pautas y técnicas necesarias para incrementar tu estabilidad, equilibrio y salud mental.
  • No somos perfectos y en ocasiones puede llegar a ser irritante escuchar frases como “Tú eres psicólogo no te molestes” o “ay al psicólogo le dio vergüenza”, y es que somos seres humanos que lloramos, gritamos, reímos, nos molestamos, y aunque ejercemos una excelente profesión y por tanto  somos especiales tal cual como un médico que posee una importante labor  salvando vidas, aunque a veces en su intento algunas no sobreviven, de igual forma siempre buscan curar enfermedades pero eso no los hace exentos de padecerlas, o como un comunicador que se apega a los hechos ocurridos para transmitir una noticia aunque a veces en ese camino puede tergiversar la información, del mismo modo que el ingeniero que emplea sus conocimientos basados en las ciencias exactas, aunque en ocasiones pueda errar en su cálculo. Al igual que estos profesionales nosotros los psicólogos no estamos libres de cometer errores o equivocarnos, ni tampoco somos robots sin sentimientos, somos personas lejanas a la perfección.
  • Según lo mencionado con anterioridad, es necesario destacar que como psicólogos también necesitamos de otro psicólogo, buscando nuestra propia salud mental y tener las más óptimas condiciones para realizar nuestro trabajo.
  • No somos médicos no tenemos la facultad de medicar, para eso existen otros especialistas, como lo son los psiquiatras, con quienes en los casos que son necesarios se trabaja mano a mano para obtener mejores resultados.
  • No somos los psicólogos de nuestras familias, allí somos un miembro más, que no establece su objetividad sino que es totalmente subjetivo lleno de emociones y cariño, aunque algunas veces podamos brindar nuestras habilidades a situaciones específicas dentro de nuestra familia no quiere decir que estos sigan nuestras recomendaciones. Aquí entra el dicho “nadie es profeta en su propia tierra”, y en todo caso aunque las sigan, podemos llegar a sentir con frecuencia incomodidad con hechos como, enterarse de los problemas maritales de tus tíos, la deficiencia en las relaciones materno-filiales de tus primos, entre otros. Aunado a esto, está la responsabilidad que de manera consciente e inconsciente pesa sobre los hombros del psicólogo por resolver estas situaciones, por eso lo más prudente es remitir a tu familia a otro psicólogo y encontrar un buen especialista para que los atienda, en eso si puedes ser de gran ayuda, aquí ambas partes deben entender lo contraproducente que puede llegar a ser para todos los involucrados utilizar a tu familiar psicólogo como tu terapeuta, un ejemplo muy claro de esto se evidencia en la siguiente pregunta ¿cuándo a un paciente se le realiza una cirugía de cerebro sería conveniente que su hijo el médico neurocirujano lo operara?.
  • No te damos una pastilla para resolver tus problemas, por eso es importante que comprendas que el tratamiento va ser más largo que uno farmacológico, pero en éste intervienen elementos muy importantes de tu persona para el éxito del mismo, como lo son tu fortaleza, disposición y ganas de seguir con las recomendaciones e indicaciones que te está ofreciendo tu terapeuta.
  • No somos iguales, puedes encontrar a dos psicólogos con opiniones distintas sobre un mismo tema, y aunque dentro de la psicología existen parámetros que nos van formando a lo largo de la carrera. Cabe destacar que hay diversas modalidades y corrientes terapéuticas, de modo que cada psicólogo tiene la potestad para decidir con cual trabajar. Es por ello que puede ser que asistas a varios psicólogos antes de encontrar con el que te sientas cómodo y suceda un enganche terapéutico, un ejemplo de esto puede ser un paciente diagnosticado con una cardiopatía que empieza a recibir tratamiento pero éste no está evidenciando mejoría y no se siente  cómodo con el cardiólogo que lo está tratando, así que busca una segunda opinión, asistiendo a otro especialista con el cual hay mayor entendimiento y mejores resultados, del mismo modo puede suceder con los psicólogos, por ello es importante no juzgar a todos por lo que consideras fue una mal experiencia en tu primera cita. Sino te funciona con uno inténtalo con otro.

Para concluir vamos a explicar lo que si somos: somos profesionales de la salud que implementamos todos nuestros recursos y habilidades para que logres una mayor estabilidad psíquica, nos especializamos en diversas áreas como los psicólogos clínicos, deportivos, infanto-juvenil, psicooncólogos, escolares, organizacionales, judiciales, entre otros; cada uno con diversos y múltiples propósitos al igual que con una distinta  población tratante, que se unen con una intención: potencializar las capacidades de sus pacientes o clientes y fomentar el desarrollo de nuevas.

Para lograr lo mencionado con anterioridad adquirimos diversas competencias a lo largo de la carrera que vamos agudizando con la práctica de la misma, y que permiten alcanzar los objetivos terapéuticos establecidos con el paciente, tales como la capacidad de escuchar, destrezas para analizar e interpretar, pericia para la resolución de conflictos y reflexión, entre otros.

Es por ello que esperamos que comprendas que ir al psicólogo no significa necesariamente desequilibrio mental, al contrario significa que eres una persona lo suficientemente cuerda y responsable para darle importancia a tu salud mental. Te invitamos a salir de tu zona de confort y que emprendas un viaje que te permita comprenderte, conocerte, quererte y aumentar tus capacidades. Recuerda  que bienestar implica sentirte bien en cada aspecto de tu vida, y para lograrlo es necesario estar en óptimas condiciones a nivel fisiológico y  psicológico.

Finalmente antes de despedirnos, te dejamos este divertido video, en que el se explica de una forma metafórica la labor que realizamos los psicólogos 😉

Autoras:

Lcda. Andrea Guerrero

Lcda. Ana Vasconcelos